lunes, 7 de julio de 2008

Integrándose al mundo intelectual

Uno que viene del rancho se las puede ver negras tratando de hallarse en este mundo de intelectuales. Adaptarse a la vida académica a veces resulta casi tan difícil como aprender a destacar en sociedad. Pero aunque por momentos parece una meta inalcanzable, no se preocupen, señores usuarios. Así como para destacar en sociedad existen reglas fijas, como aprender a caminar en zapatos de tacón, usar bien los cubiertos y evitar derramar tu bebida sobre tu ropa o la del caballero de al lado, así también en el mundo de la academia hay normas a seguir. El día de hoy, damita, caballero, te traigo la lista de conceptos básicos que te permitirán entender el funcionamiento de este extraño universo. Si te adhieres a las reglas que aquí te presento, ten por seguro que no sólo lograrás adaptarte con facilidad al nuevo estilo de vida, sino que, además, te convertirás en un miembro destacado de este exclusivo club.

1) Memoriza los diez mandamientos y las escrituras de la Biblia del Académico (publicada en este blog con anterioridad)

2) Repite después de mi: "Nadie tiene que saber que desconozco la respuesta."

3) Incluso, repite para ti mismo el siguiente repertorio de frases, al menos dos veces al día, durante tus primeras semanas, hasta que te sientas convencido:
a) Soy una persona ocupada y siempre, siempre, tengo mucho que hacer.
b) Apoyo al partido demócrata
c) Hacer research es un trabajo real, digno, e importante.

4) Lee el New York Times

5) Siempre que te sea posible, busca citar a personajes reconocidos. Esto funciona bien con las vacas sagradas de tu área, aquellos legendarios políticos, escritores, científicos, o investigadores que han hecho historia y que todos reconocen. Pero el truco es mucho más efectivo si logras citar a un "fellow researcher," osease, otro monito que esté sólo un par de peldaños arriba de ti en la jerarquía académica. Esta palmada en la espalda a tus superiores dejará claro que entiendes el sistema y te abrirá paso hacia le élite de los doctos.

6) Si alguien te pregunta sobre tus planes a futuro, contesta siempre lo siguiente: "Nunca quiero dejar la Universidad. Cuando acabe mi doctorado, haré un post-doctorado. Y después, otro. Cuando me tenga que graduar, quiero ser profesor en Harvard. Y jamás dejaré de hacer research, y cuando muera mi asesor de tesis, entonces yo heredaré su lugar y seré la luz y guía de mis asesorados."

7) Invéntate otro nombre, y quítate un apellido. Aquí todos tienen dos nombres y un apellido, y la gente se confunde cuando tú no.

8) Crea una firma electrónica que consista en tu nombre, tu puesto y tus teléfonos. No te preocupes si no tienes puesto. Autodenomínate como te parezca adecuado. Agrega varios teléfonos aunque sean falsos. Nadie jamás te llamará porque todo es por mail, y suena profesional tener muchas líneas. Esta firma se incluirá, automáticamente y por configuración previa de tu correo, en todos los mails que envíes.

9) Además de la firma por default, firma todos tus correos con tus iniciales. De esta forma, a los receptores les quedará claro que, como todo buen académico, tenías tantas cosas que hacer que no te dio tiempo de escribir tu nombre completo.

10) La idea de usar las iniciales de las palabras al escribir es una constante en el mundo de los ilustrados. Aprende los acrónimos importantes en tu área y crea los tuyos propios. Si no logras inventar ningún concepto innovador en el cual puedas utilizar un acrónimo, no te angusties. También se vale crear acrónimos para conceptos existentes. No te limites al ámbito profesional. Puedes hacerlo en tus conversaciones por Messenger, por ejemplo: TMT. (tengo mucho trabajo). ¿QHM si TMT? (¿qué haces en Messenger si tienes mucho trabajo?). MEP (me encuentro procrastinando).

11) Adiestra el arte del lenguaje académico y asegúrate de utilizarlo no sólo al escribir sino también en tus conversaciones cotidianas. Cierto, es complicado. Pero aquí te va una lista de algunas de las frases más utilizadas.
a) Para decir "Me cae que eso que dijistes te lo sacastes de la manga," es mejor preguntar: "¿Exactamente en qué información está basado ese argumento?"
b) Para decir “Lo que voy a decir es cierto y no te atrevas a contradecirme,” sería acertado plantearlo así: “De acuerdo con [inserte nombre de vaca sagrada]…”

12) Si estás escribiendo un paper, relájate. Piensa que cada texto académico lo leen, en promedio, siete personas. Si a eso añades que los textos de las vacas sagradas los leen cientos de personas, tendrás suerte si tu paper lo lee alguien más que tu profesor. Así que tú, tranquilo.

13) No te deprimas por la regla anterior.

Por lo demás, tu tranquilo. Confía en mí, ya ves que soy bien buena en eso de ser popular y destacar en los rumbos de la alta sociedad.

2 comentarios:

Eric Uribares dijo...

oyes , las sugerencias se aplican a los círculos de petulantes literarios?? me uuurge la respuesta, muchas gracias. te dejo mis teléfonos

atte
Eric E. Uribares.
Isteri
22 33 44 5
11 222 44 56778
122 334 44 3

oficina:
22 556 78
'9965 43
332 1 778

cel:
223 456678
3222 66789

Marcela Orraca dijo...

Eric,
Efectivamente aplican al ámbito de la literatura, así como a cualquier otro ámbito en el que abunde la petulancia.
Sin embargo, se pueden encontrar matices dependiendo del área. ECMSP (en cuanto me sea posible) te mando un reporte sobre las recomendaciones específicas del área en cuestión.

M

Marcela O. Corona
Researcher at Research institute for Research and Researchers AC
617 495 8274 55 3848 ext 1118983838
or
66(716) 69696 44938273
88373 (335721) 11930 38 950 838